La competición implica velocidad, concentración y disposición; los resultados de un error son normalmente catastróficos dado que hay poco espacio para el error cuando “pilotas” al 100%.
El pilotaje en carretera abierta es menos intenso y lejano del límite absoluto, pero dado que las circunstancias que la rodean son menos controlables, los errores y el exceso de agresividad pueden ser igual de catastróficos. Muchos “correcaminos” han abandonado el pilotaje en carretera. «Demasiado peligroso, demasiadas variables y demasiado fácil de dejarse llevar por la velocidad» dicen los especialistas de circuito. Los “Correcaminos” con exceso de adrenalina suelen terminar pilotanro en carretera abierta igual que lo harían en circuito, y no es causa de sorpresa que sean cazados por la policía, las leyes de la física y la fría y dura realidad de un entorno no acondicionado para el pilotaje de “décimas de segundo”. Pero como muchos de nosotros sabemos, un tranquilo paseo por una de nuestras carreteras favoritas, puede ser una de las mejores maneras de pasar unas horas libres con la moto que amamos. Y esas pocas horas se disfrutan mejor pilotando a “El Ritmo”.
EL RITMO
“El Ritmo” hace énfasis en el control de la moto y quita énfasis a la velocidad pura. Acelerar a fondo y frenar en el último instante no son parte del programa de actividades, eliminando de forma efectiva los dos principales peligros presentes en accidentes individuales de motos en pilotaje deportivo. La inercia de paso por curva es el nombre del nuevo juego, indicaciones contundentes al manillar para colocar la moto correctamente a la entrada de la curva, sujetar fuerte y meterla sin perder tiempo ni metros. Como el acelerador no estaba a tope a la salida de la última curva, la siguiente no requiere mucho freno, si es que requiere algo en absoluto. No es infrecuente salir una mañana y no ver una sola luz de freno encendiéndose.
Si hace falta frenar, se aprieta la maneta del freno delantero de forma suave, rápida y con un cierto nivel de presión para adecuar la velocidad de entrada en la curva en el menor tiempo posible. Entrar en la curva con los frenos, es incrementar las opciones de salirse de la carretera y una clara confesión de que estas yendo demasiado fuerte y no consigues ponerte a la velocidad correcta para la curva con suficiente antelación porque has mantenido el gas abierto demasiado tiempo. Pilotar a “El Ritmo” te hace depender menos del acelerador y los frenos (los elementos de los que más fácilmente se abusa) y te permite incrementar tu habilidad para juzgar la velocidad correcta de paso por curva, lo cual es el aspecto más divertido del pilotaje por carretera abierta.
TU CARRIL ES TU LIMITE
Cruzar la línea central en cualquier momento, excepto durante una maniobra de adelantamiento, es intolerable y otro signo de que estas yendo demasiado fuerte para mantenerte con el grupo. Incluso cuando tengas total visibilidad en una de izquierdas, mantente a la derecha de la central. Mantenerse a la derecha de la línea es más exigente que simplemente cortar cada curva y cuando todo el grupo acepta ésta práctica inteligente, la tentación de engañar se elimina por la presión del resto del grupo y por la lógica. Aunque el pilotaje en carretera abierta no debe describirse en términos de competición, puedes pensar que tu carril es la pista. Dejar tu carril es aumentar las posibilidades de un accidente.
El control total de la moto hace que uses cada centímetro del carril si las circunstancias lo permiten. En curvas con total visibilidad y sin tráfico en contra, entra por el extremo abierto de la curva, “tira” la moto relativamente tarde hacia el interior para retrasar el vértice del interior y acelera para salir, rozando el extremo de la salida a medida que la moto se levanta. Usa el manillar de manera contundente pero suave para minimizar el tiempo de transición; no te tires “a cuchillo” porque el chasis flexará y podrá sacarte de la línea correcta. Dado que no has apurado la frenada, podrás abrir gas más rápido, antes del vértice, estabilizando la moto y preparándola para la salida. Con mucha frecuencia, las circunstancias no permiten la utilización completa del carril de exterior a central y de vuelta. Curvas sin visibilidad, tráfico en contra, gravilla y porquería son algunos de los criterios que exigen un pilotaje más conservador, así que déjate un margen de 30 a 50 centímetros para el error, especialmente en el lado izquierdo donde el tráfico en contra puede resultar fatal. Simplemente haz más estrecha la entrada de las curvas ciegas de derechas y fija el vértice de las curvas ciegas de izquierdas un par o tres de decímetros dentro de tu carril de forma que puedas evitar tráfico en contra que no hayas visto y puedas estar pisando la central. Dado que estas pilotando a “El Ritmo” y no al límite, el control que has de mantener en la entrada de las curvas te dá un tiempo extra para poder escapar de gravilla o porquería inesperada; de forma general, el sitio por donde pasaría la rueda exterior de un coche es el sitio más limpio en una curva con suciedad ya que el peso del coche se desplaza a dicha rueda, limpiando mas porquería a su paso: busca ésa línea.
UN BUEN GUIA, SEGUIDORES DESEOSOS
La carretera no es un entorno de competición, y hace falta humildad, auto confianza, y autocontrol para mantenerlo así. El guía marca el ritmo y busca en sus espejos síntomas de apuro en los que le siguen, demasiada distancia entre motos en las rectas, cruzar la linea central y descolgarse de la moto en las curvas. Si el guía se quiere apartar, simplemente reduce su velocidad en recta ligeramente, pero continúa disfrutando de las curvas, cerrando la formación pero sin perder nada de diversión. El pequeño grupo de tres o cuatro con el que salgo es tan homogéneo que el ritmo es prácticamente idéntico independientemente de quien guíe. El guía cambia de vez en cuando mediante un signo con la mano, pero nunca hay un cambio de guía porque el ego de alguno asome por la manga derecha. No te equivoques, el pilotaje es entretenido -y rápido- en las curvas. Cualquiera con un buen brazo derecho puede pasar el cuchillo en las rectas; pero es la habilidad en las curvas lo que hace posible “El Ritmo”.
Las distancias entre motos son relativamente amplias, y las rectas -pasadas a una velocidad moderada- son la oportunidad perfecta para ajustar los espacios. Mantener una buena distancia sirve para varios propósitos, además de ser más seguro. Minimizas el riesgo de “comerte” las piedrecitas que saltan y la policía tendrá menos motivos para pensar que se está desarrollando una carrera. El estilo de “El Ritmo” de no descolgarse de la moto en las curvas también reduce la apariencia de estar dando gas demasiado fuerte y añade un grado de madurez y sensibilidad a los ojos de del resto de usuarios y de los agentes de la ley. Indudablemente es un reto pasar por curvas mientras permaneces perfectamente sentado en la moto.
El adoctrinamiento de los nuevos “pilotos” lleva un tiempo ya que “El Ritmo” lleva a desarrollar pasos por curva realmente rápidos y los novatos quieren enroscar el acelerador a la salida para recuperar lo que han perdido en la entrada de las curvas. Nuestro grupo reduce la velocidad drásticamente cuando un nuevo piloto se une al grupo dado que debido a la técnica de velocidad moderada en rectas y no utilización de los frenos puede llevar al no experto a entrar en una curva demasiado rápido, creando las condiciones perfectas para el accidente más común. Con un piloto novato aprendiendo “El Ritmo” detrás tuyo, toca el freno con suficiente antelación a la curva para alertarle y asegúrate que entiende que no hay ninguna presión por mantenerse con el grupo.
Hay comunicación constante mientras se rueda a “El Ritmo”. Un pie fuera de la estribera indica porquería o gravilla en la carretera y una indicación de reducir la velocidad o de un giro se señala con el brazo izquierdo con suficiente antelación. La señalización de giros se usa para cambios de carreteras y para los adelantamientos, una señal de agradecimiento también con la mano izquierda para agradecer a los “enlatados” que se apartan a la derecha para facilitar el adelantamiento. Dado que no has de mantener una sujeción tan firme del manillar, la mano izquierda también está libre para saludar a los moteros que circulan en dirección opuesta, una cortesía que nos gustaría que se mantuviese.
Si te vas haciendo a la idea de que “El Ritmo” es una forma relajada y no competitiva de salir con tu grupo, lo has entendido bien.»
El Ritmo, pilotar rápido y seguro en carretera, con el máximo placer y disfrute
Existen diferentes formas de disfrutar de nuestra moto, no solo el circuito, sino la infinidad de carreteras de todo tipo y que harán que nuestro disfrute sea supremo.
En la carretera, lo más importante o una de las cosas más importantes, es obtener el placer de pilotar, no siempre es la velocidad pura, sino que una técnica que hace muchos años que aplicamos y que transmito a mis alumnos en los cursos de pilotaje moto en carretera, esa técnica no es otra que EL RITMO, si controlamos esa técnica y la aplicamos a nuestro pilotaje, os aseguro que llegareis a casa y vuestra sonrisa y sensaciones de placer no desaparecerán en horas.
¿Qué es el El Ritmo?.
Todos o casi tod@s los que pilotamos nuestras motos, sabemos y tenemos claro que en una salida por carretera, lo más divertido no son las rectas, sino que lo son las curvas, y, en ese entorno es donde más nos concentramos cuando pilotamos y nos divertimos, pero, siempre hay un pero, debemos tener claro como pilotamos y que pilotamos, así como el entorno por donde nos movemos, pues nos va la vida, porque nos movemos en una carretera y los peligros son muchos e imprevistos.
La concentración en el pilotaje y nuestra atención ha de estar al máximo nivel, no están permitidas las distracciones, ya que el mínimo error de cálculo, nos puede acarrear una salida de la vía, un guardarail asesino y en el mejor de los casos acabar en un campo, lo que puede ser un accidente leve o mortal. No juguemos con nuestra vida y la de los demás.
Una de las actividades que practicamos en nuestros cursos, consiste en realizar tramos de carretera de todo tipo utilizando los frenos muy poco y esto como es, pues básicamente consiste en saber utilizar el ritmo de nuestro pilotaje anticipándonos a las curvas, esto es entrar en las curvas todo lo rápido que podamos, pero adaptando nuestra velocidad previamente, realizando una estimación y ejecutándola, con total seguridad.
Sigamos, básicamente la técnica hará que en las rectas no asumamos una gran velocidad, para en las curvas llevar más ritmo y un mayor control de la maquina, ante lo cual mayor velocidad de paso por la curva. Si utilizamos estas técnicas, nuestras medias de velocidad serán más altas y nuestro disfrute mayor.
Con lo expuesto no quiero decir que no debamos frenar, que si debemos, pero cierto es que si nuestro ritmo es alto, no abusaremos de los frenos, sino que si leemos el entorno y la carretera, nos colocaremos en la entrada de la curva y la trazaremos de forma correcta, sin darnos cuenta nuestro ritmo será demoledor, con total seguridad y con el control absoluto sobre nuestra maquina.
Otro factor importante en nuestro pilotaje por carretera, es que no debemos invadir el carril contrario, más que nada, por lo de volver a casa sano y salvo.
Debo comentar, que no se debe invadir el carril contrario, ni con la moto, ni tampoco con nuestro cuerpo, por nuestra seguridad, lo de descolgarse de la moto como si estuviéramos en un circuito, por carretera es del todo absurdo, para ir rápido por carretera es del todo innecesario pilotar como si estuviéramos haciendo unas tandas en Montmelo.
Para asumir una gran seguridad y educar a nuestro subconsciente en todas las labores y sensaciones del pilotaje de nuestra moto, es cuestión de hacer km y km, practicando todas las actitudes y puliendo nuestros defectos de pilotaje, que todos más o menos tenemos o hemos tenido.
Para poder asumir un ritmo alto por la carretera, debemos tener claro que hacer ante una curva, siempre buscaremos el centro de la calzada, frenaremos lo necesario, buscaremos el ápice interior de la curva, si es necesario retrasando el contacto con la finalidad de tener una mayor visión de la curva, levantar la moto y acelerar. Como siempre le digo a mis alumn@s al llegar a una curva debemos tener todos los deberes hechos, saber dónde colocarnos y cuando inclinar la moto, para entrar en la curva y cuando abrir gas para salir de la misma, de forma segura, en todo este proceso lo más importante es la mirada, porque donde miramos, vamos, además también debemos pilotar a base de contramanillar para una mayor seguridad, rapidez de movimientos y mejor control de la moto.
Cuestiones básicas del pilotaje, no es la velocidad absoluta, ya que en las rectas no hay emoción, sino solo nos sirven para descansar y relajarse, para volver a la carga en la siguiente curva. La moto se controla con el gas, con el contramanillar, el freno motor y el cambio.
Lo expuesto para los pilotos que ya tienen una buena experiencia, ya conocen estas técnicas, pero nunca está de más repasar conceptos y sobre todo cuando estamos pilotando nuestras motos, debemos ser muy analíticos con todas las sensaciones que de forma continua nos tramite nuestra moto y que asumimos inconscientemente.
Por lo que el RITMO, es muy importante, cuando viajamos o nos movemos por nuestras rutas preferidas, porque la satisfacción es muy grande y el disfrute mucho más y por supuesto la seguridad, siempre debe primar en todos y cada uno de nuestros movimientos o acciones.
Otro tema importante, es cuando rodamos en grupo, ya que los ritmos de los integrantes del mismo, pocas veces coinciden, ante lo cual el road líder controlara la ruta y el grupo y el que realiza la función de escoba, procurará que no se pierda nadie. Pero cundo se rueda en grupo se deben tener claros una serie de conceptos, tales como el ritmo de cada uno de los componentes del grupo, nuca debemos rodar con un ritmo superior al que tenemos asumido, es peligroso ya que se rodará por encima de nuestras posibilidades, nunca debe haber piques absurdos que solo traen problemas e inconvenientes, en el mejor de los casos o algo más grave, al rodar en grupo dejemos los egos en casa, seamos humildes y si quien nos precede rueda más rápido no intentemos seguir su ritmo, es posible que tengamos problemas y arruinemos la salida del grupo o acabemos en el hospital o peor.
Cuando pilotamos, nuestras maravillosas maquinas, seamos responsables, nos va la vida, dejemos los egos personales en casa, seamos humildes y siempre debemos aprender, porque nunca se deja de aprender, pilotemos con la máxima seguridad, hagamos que nuestra experiencia crezca, porque podremos rodar más rápidos y seguros y disfrutar de nuestra libertad.
By MAYAM